Seguro que más de una vez te has preguntado por qué en verano a las mujeres se nos cae más el cabello. Cierto es que en esta estación nuestro cabello está mucho más desprotegido frente a los agentes externos como el sol, la salitre o el cloro de las piscinas y que con las prisas y el cambio de rutina se nos olvida dedicarle el tiempo necesario a su cuidado.
Es conveniente aclarar que la caída del pelo, en general, es algo completamente normal y que forma parte del ciclo vital del cabello (se estima que, en condiciones normales, una personal pierde entre unos 100 y 125 pelos al día, unos 3000 al mes y las cifras anuales ascienden a entre 30 000 y 40 000 cabellos), pero en verano esa caída se intensifica más. Se trata del efecto conocido como “caída estacional“, esto es, la alteración que se produce en el ciclo del pelo en ciertas estaciones del año. Y esta caída estacional suele afectar más entre el final de la primavera y el inicio del otoño y las mujeres son las más perjudicadas.
Esto se produce básicamente porque la exposición a los rayos UVA y a las altas temperaturas cambian el ciclo vital del cabello estimulando la producción de la hormona que regula su crecimiento. De esta forma, vemos como nuestra melena tiene un crecimiento más rápido en estos meses pero también una mayor pérdida. Además, como ya comentamos al inicio, el verano es una época en la que exponemos nuestro pelo a determinados factores que pueden debilitarlo y, por consiguiente, repercutir en una mayor caída del mismo.
Existen además otros factores que influyen en la caída del pelo en verano. Es el caso del estrés, que aumenta con la llegada de la primavera. Mantener unos altos niveles de estrés y no descansar correctamente provocan como efecto inmediato una gran caída de cabello. Otro aspecto a tener en cuenta, en especial para las mujeres, es el tema de la anemia o los sangrados menstruales abundantes, pues el hierro es uno de los minerales esenciales para que nuestro cabello esté fuerte y sano. En periodos carenciales de hierro, este se debilita y tiende a caerse.
Algunos consejos para evitar la pérdida de cabello
Ya hemos visto que la caída del pelo es algo normal, pero si queremos que esta sea moderada y que nuestro pelo esté más fuerte y sano para que resista mejor los cambios hormonales, siempre hay pequeñas cosas que podemos hacer para lograrlo.
– La alimentación: llevar una dieta variada y equilibrada es indispensable para sentirnos bien y tener una salud óptima, lo cual se refleja en un pelo más sano, ya que estaremos proporcionándole los nutrientes necesarios para que crezca fuerte y sano, como el hierro del que hablábamos antes.
– Evitar sustancias nocivas: así como una buena alimentación es esencial, lo es también evitar el consumo del alcohol, tabaco y demás sustancias perjudiciales para nuestra salud, ya que tienen toxinas que afectan directamente a la asimilación de nutrientes, por lo que nuestro pelo, piel y uñas serán los primeros afectados con su consumo.
– Evitar secadores y planchas: en verano ya exponemos nuestro pelo a suficientes agentes dañinos, así que lo mejor es prescindir de secadores, planchas, tenacillas y demás utensilios que moldean el cabello a través del calor. Lo mejor es dejar que nuestro pelo se seque de forma natural para evitar estropearlo más.
– Mantener una buena higiene del cabello: con esto estaremos eliminando los restos de salitre, cloro y demás elementos que pueden dañar el cabello. Sobre todo, aquellos cabellos que son muy grasos es necesario lavarlos diariamente.
– Masajear el cuero cabelludo: podemos aprovechar cuando estemos duchándonos para realizar pequeños masajes en nuestro cuero cabelludo, lo cual ayudará a estimular la circulación sanguínea de esa zona, activando el crecimiento del cabello.
– Tratamientos y productos: por fortuna, actualmente en el mercado existen múltiples productos que pueden ser de gran ayuda para combatir la caída masiva del cabello, como por ejemplo un champú de tratamiento para pelo castigado y frágil.
– Gorros: no solo son buenos para resguardarnos del sol y del calor, sino que su función también resulta muy ventajosa para que las radiaciones ultravioleta no incidan directamente sobre nuestro cuero cabelludo. Eso sí, tampoco hay que pasarse con su uso, siendo recomendable dejar respirar la zona de vez en cuando.
Por último, es importante recordar que la caída del cabello no es lo mismo que la alopecia y que es algo totalmente normal. No obstante, un exceso en la caída puede ser un indicio de un problema más grave, así que si ves que la caída se prolonga más de lo esperado o se produce fuera de estos meses, no dudes en acudir a un médico especialista pues él se encargará de estudiar tu caso en profundidad y ofrecerte las soluciones necesarias.